Hoy hemos visto en clase la proporción áurea. Esta proporción ha sido aplicada con éxito en muchos proyectos y se le ha asignado muchas definiciones y nombres.
Esto, fue un descubrimiento de Fibonacci. Ésta proporción se basa en una serie numérica: 0.1.1.2.3.5.8.13.21.34.55.etc... Es una serie infinita en la que la suma de dos números consecutiso siempre da como resultado el siguiente número.
Seguimos la división de sucesión:
Si unimos diferentes vértices con una línea nos aparecerá la famosa Espiral de Oro que se encuentra presente en la naturaleza dando lugar a una proporción “natural”.
Hay muchos ejemplos en la vida cotidiana donde nos podemos encontrar esto y particularmente vemos muchas veces sin darnos cuenta.
Algunas personas opinan que existe una excesiva idolatración de este número y que su presencia no potencia la belleza ni el equilibrio de los objetos, que es una simple ensoñación de la mente creativa, en su afán por justificar sus decisiones.
Tampoco queda claro que hay que veraz en las historias que se cuentan sobre esta proporción.
Muchas personas escépticas afirman que la mayoría de éstas, no están construidas en torno a esos patrones, sino que se trata de aproximaciones casuales que la mente humana se obceca en mitificar.
De una forma u otra, esta ley matemática, así como su historia y su relación con la creatividad humana resulta misteriosa, y en su vínculo con el diseño actual delogotipos no se creía que llegaría a alcanzar tanta relevancia en la historia de la humanidad; jamás se pudo imaginar que la división de un segmento definiría propósitos geométricos.